Tú y los lirios,
aunque sean falsos,
tú y los lirios.
Aquí el perro
quiere ser tu ciervo,
               la luz tu guardería.
Pero nosotros
               a saltos,
sin piezas
              de camada.
Aquí no drena
                         el riñón:
comes saúco,
              amansas agua.
            Déjame
            traerte vino, darte hombros,
deja que mi mano
            camine
como tú.
"Piedra de vino".